vendredi, mars 17, 2006

Violación

Ayer dieron en “Justicia para todos”, programa que me encanta, el caso de una mujer maltratada. Une mujer “bien”, no una mujer pobladora sin cultura, una mujer como amigas mías, como yo.

Y entonces recordé ese capítulo de mi vida que sólo una vez le conté a alguien, a Ar, y hace poco. No le había llamado nunca por su nombre. Nunca se lo dije a M. Sólo le dije que por el músico me tenía que hacer la prueba del sida.

El músico era un francés que estaba medio loco, era medio atractivo. O sea muy atractivo en ciertas cosas y MUY poco atractivo en ciertas otras.

Yo no quería con él, como casi siempre.
Es raro que a mí me guste alguien, en general soy “elegida”, no soy yo quien elige. Y los pocos que elijo no me pescan… (hablamos de eso justo ayer mi amiga Sil y yo, y que ella quería comenzar, como otra amiga suya, a ser quien elije para ganar lo que uno quiere y no terminar aceptando ser la “elegida” de otro). En fin. Fui elegida por él, él insistió, yo dije no, no, no, quizá, bueno ya. Y empezamos un romance.

Él vivía en un pueblo de mala muerte a 2 horas y algo de Santiago, en una choza prácticamente. Yo no estaba enamorada, pero sí sola y aceptaba estar con él.
Teníamos problemas porque fumaba y tomaba mucho para mi gusto. A él le gustaba que yo lo fuera a visitar, a mí no me gustaba estar en ese lugar… y prefería verlo en casa de un amigo suyo donde se quedaba cuando estaba en Santiago. Antes estuvimos en la playa.

Una vez decidí ir a visitarlo. Le avisé. Él alistó el lugar y estuvo casi todo bien… por supuesto él no tenía un duro y yo debía comprar TODO para comer… pero en fin, así era. Él me preguntó si me molestaba que vinieran amigos de él, dije que no. Y llegaron. Nunca más me pescó ni estuvo conmigo. (Yo iba de Stgo a verlo). Además, tomaba y fumaba N (lo que me carga, ambas cosas). Y luego llegaba entero pasado a la cama… mal. Le dije. Dijo que nunca más. Volvió a ocurrir 2 veces más.

La tercera vez, me enojé. Y tipo 4 am, cuando seguían en cháchara, yo tratando de dormir, todo el patio lleno de colillas y todo sucio… decidí que me iba.
Me levanté hice mi bolso y le dije que me iba y me fui caminando a la comisaría, con el objetivo de dormir ahí. Los amigos raudos lo dejaron solo y él me siguió, corriendo.
Le dije que no, que no, que no y en eso estaba cuando recordé que dejé encima del velador mis anteojos, el plano de relajación de los dientes y un libro que estaba estudiando para la tesis. Merde. Puras cosas importantes de llevarse.. Y me devuelvo con el propósito de tomar esas cosas y partir again. No quería estar un minuto más con él.

Llegamos a casa, ya no hay nadie. Entro y dejo bolso en la entrada y voy rápido a la pieza, guardo cosas, voy a salir y él dice que no, que hablemos, yo estoy furiosa me quiero puro ir y cuando llego a la puerta está cerrada con llave.
Era de esas casas con fachada continúa a la calle, o sea no había forma de salir.
Le empiezo a gritar como loca que me abra, que me abra, que me quiero ir. Él no abre, y no, no, no. Que espere hasta la mañana, que son las 5 am, que no me va a dejr irme así sola a es ahora.
Yo estoy como loca. Y empiezo a tratar de romper la puerta y él me agarra. Me agarra fuerte las manos, muy fuerte. Mide 1.84 y es forzudo… me duele. Harto. Me doy cuenta que él tiene el sartén por el mando.. me sigue apretando MUY fuerte y es como una amenaza tácita y obvia, hay un “cállate” implícito. Me callo. Estoy cansada.

Hace frío y me doy cuenta que no me puedo ir, es imposible salir de ahí.
Me siento en el piso del living (no hay sillas) y me acurruco encima del bolso. Él dice que vaya a la pieza. Yo no quiero estar cerca de él, quiero que esté lejos. Estoy cansada, me duelen mucho los hombros y las manos pues me agarró fuerte.
Entonces en un momento él va por mí él al living. Yo no quiero pero sé que no tengo voz, él tiene fuerza, él dice que debo dormir en la cama que no sea niña chica. Yo no quiero estar cerca de él, pero no tengo voz.. y él me lleva.

Y entonces ahí, a su lado, él comienza a hacer lo que sabe que yo NO quiero hacer con él. No quiero. Se lo hago ver, en silencio… (no tengo voz, él lleva la batuta)… pero lo que yo quiera da igual. Él quiere. Y eso basta en ese escenario. Y entonces entra, sin preparación, sin visto bueno, da igual. Yo sólo “acato”, sin disfrutar… sin negarme tampoco. Pero no queriendo. Espero que él se canse y que llegue la mañana. A penas es hora laboral, tomo mis cosas y me voy…

Camino y camino hacia el lugar donde supuestamente pasan buses a Viña… mi destino. No hay.
El tiempo apremia y hago dedo para que alguien me lleve a la carretera donde pasan más buses.
Y ocurre que una camioneta para y el tipo me empieza a preguntar en qué trabajo. Le digo que doy clases y empieza que como pagan y tal… y entonces me dice que yo tengo físico para ganar más plata, que podría tratar, que si me interesa, que si me interesa ahora con él….
En todo el rato trato de hacerme la tonta. Digo que no y me río, que no tengo pasta para eso y cosas así… y lo recuerdo a él la víspera… usándome, como si yo fuera un objeto sólo para satisfacerlo, independiente de mi voluntad.

La ruta del pueblo del músico al otro pueblo donde salían buses a Viña era de cerca de 40 minutos, los 40 minutos más largos de mi vida. Me bajé ahí a pesar de la molestia y asombro de quien me llevó, que no podía creer que una niña joven con poca plata no aceptara su oferta… Me subí al bus y lloré…Mucho. Pero no sé, como que cerré el capítulo y llegué a hacer clases como si no hubiera pasado nada.

Nunca hablé de esto con nadie. Las manos me quedaron moradas por 3 días y me dolió una semana moverlas igual que los hombros.
A M le conté que una vez alguien fue violento conmigo físicamente y que con este tipo había sido alguna vez sólo con pastillas… pero que no le creía nada ahora después de lo que me hizo (violencia física) y por ende me iba a hacer examen… no le dije toda la verdad.
No sé, no quería verme a mí como víctima de eso. No a mí, no a alguien como yo, con estudios, con certeza que eso no se permite…. No quería la conversación de ¿cómo no gritaste o no dijiste que no o no lo denunciaste después?... de alguna manera me dejó sin voz la situación.

Eso pasó el 2003.
En el sur, en fberero de 2006, hablando un día con Ar de no sé qué, le cuento esta historia y digo “entonces él me violó”. Y fue la primera vez que lo dije.
Tb le dije que no era como en las películas donde la ella tiene energía para patalear y negar… no me pasó eso. Tampoco me quedé sin ganas nunca más… Pasó como lo conté aquí.

Me había pasado antes que un tipo que yo no invité, que estaba alojando en la misma casa que yo, con trago, se fue a meter a mi cama en medio de la noche. Y que le dije que no, que se fuera y no quería… pero finalmente sí se fue.

Esa vez tampoco dije nada a nadie, simplemente al día siguiente me fui de ahí.

Cuento esto no por contar o deshago, sino para solidarizar y comprender a aquéllas que no pueden romper el silencio pese a que saben que hay que hacerlo… cuando estás ahí, uno se paraliza. Yo me paralicé y sólo quieres olvidar que eso ocurrió.

A mí con c/u de esos hombres me pasó una sola vez. No permití más… pero yo no tenía hijos ni estaba enamorada de ellos…
En fin, no sé si a alguna lectora le sirva este testimonio, pero en caso de…. Para eso lo conté.

2 commentaires:

Anonyme a dit…

Gracias por tu visita. La Mujer Habitada es de Gioconga Belli. Bello libro.

No comparto tus gustos musicales, tampoco me han violado o penetrado, pero sí abusado... Sólo que a los ocho años es difícil decir nada.

Pero está bien contarlo. Lee mi post del 16/04/2005, tal vez te guste.

Besos.

©Iv4n4 a dit…

a mi me ha servido. Pero de eso no hablo :) La gente es mala.

Estos no son buenos tiempos para mi. Pensar q cuando descubrí tu blog estaba en la gloria, y deseaba q te pasara lo mismo q a mi. Pues no, ahora, no te lo deseo.
Enfin.