samedi, avril 21, 2007

De amor y de sombra

Otra vez en este trabajo huevón lloré. Y eso que por fin era viernes (yo me levanto el lunes y digo quedan 4 días, el martes quedan 3 días, y así). Lloraba como magdalena encerrada en el baño sin poder parar. Otra puñalada de mi pega.

Ahora resulta que los acuerdos de flexibilidad horaria, son “viables sólo para “los titulares”, quienes se rigen por el estatuto no sé cuánto de la adm., pública, mientras que “la gente como tú”, de empresa externa, se rige por el código del trabajo. Por tanto no tiene esos beneficios de compensación de tiempo, de flexibilidad de horaria, menos obviamente de días administrativos y menos aún de bonos o bienestar”. Eso me dice la mina encargada. Y para variar mi jefe no está… y el subrogante es el malo…jefe de RRHH y asistente social ¿porqué no le habrán hecho un test de alma al tipo?.

Yo había visto la posibilidad de tener el viernes libre y así reportear. Mi jefe me dijo que claro, que existía la voluntad, que dependía de cuántas hora syo tuviera por contrato. Estuve pidiendo el contrato. Recién ayer me llegó el de enero, donde dice. Y o sea trabajamos 9 horas diarias (no 8), y la mina de RRHH que ve el asunto, frente a mi comentario “qué raro”, me dice, “no, no es raro, si hay empresas que hacen trabajar a la gente hasta en los sábados. O sea, como diciéndome, “viste que hasta somos buena onda”. El asunto terminó de patearme. Es demasiada la diferencia de trato. O sea, nosotros trabajamos 40 mn. diarios y tenemos 0 beneficio (como los enunciados). Pero a la hora del sueldo hay que “igualar”…. GRRRRRRR.

De repente vi pasar esta oportunidad de hacer este reportaje, y perderla por esta pega que detesto, pero que me salva por ahora… (¿o no?). Y todo me dio tanta impotencia y no lo pude evitar, o sea, lloraba lloraba y lloraba. Me fui al baño para que nadie me viera. Pero igual hay gente que me vio. En fin. A las 6 pm me fui (ya no me quedo, y tengo una cantidad de pendientes gigante). Estaba tan triste…

Había ido a buscar mi ropa a la lavandería y la llevaba en mi maletita azul. Pasé por mi ropa donde la costurera… todo para ir este finde a la capital (desde donde escribo). Y estaba ahí esperando el colectivo 6 que va al cerro esperanza… y para. Y abre el maletero, y pongo mi maletita. Me voy triste dentro, pensando en que qué voy a hacer, que no tengo nada de qué agarrarme, que esto y lo otro… mientras a veces me río con un programa de radio del Cristián Sánchez y una lola que no sé quién es. A los 20 mn me bajo, voy entrando y me percato… ¡la maleta!. Se me había quedado en el maletero del colectivo… Eran cerca de las 7:40, hora de irme a la capital para salir a comer como estaba previsto con N y amigos de ella. Pero, operación maleta era urgente.

Salí corriendo, le dije a un colectivero lo ocurrido. Le pregunté si había una garita, me dijo que sí pero que no paraban. Esperé por si bajaba…le pregunto a varios chóferes (obvio que no recuerdo cómo era la persona). Y nadie era… vuelvo a ver al chofer que le pregunté (o sea ya se había dado la vuelta). Me dice que vaya a la garita y pregunte. Voy. Marta, un encanto, me ayuda. Saca fotos de los chóferes. “No sé, no sé”… digo frente a las imágenes. Describo algo el auto, que era moderno, que el maletero se habría desde el interior, supongo que el tipo era joven por la radio. Selecciono varias fotos.

Ella no tiene cel de varios, igual llama a los fonos que hay. Algunos no le contestan…. Yo necesito la maleta, con toda mi ropa limpia e irme… el tiempo pasa. Y llaman. Era una de las llamadas perdidas “una pasajera que se bajó en tal lado, con una maletita azul que dejó en el maletero. Ok. Te esperamos”. ¡Era!!!. Le pedí el cel y nos coordinamos, así que me fui a mi casa y luego y recuperé mi preciado objeto. Y entonces arreglo rápido las cosas, dejo cerrado y parto…. Al rodoviario del puerto.

Es como la tercera vez que tomo el bus en Valpo y no en Viña. Normalmente no entro por el frente o el lado, sino por atrás (por donde entran los buses), pues el colectivo me deja más cerca de ahí. Habitualmente alcanzo al bus que se estaba yendo y me subo, porque normalmente tengo pasajes. Esta vez no tenía pasajes. El bus se estaba yendo con luz verde, no con roja, así que no lo alcancé y entré por el lado correcto, no por atrás, porque el colectivo me dijo que mejor me dejaba en esa otra esquina… y dije ya. Y así fue como ese día estuvo lleno de “excepciones”…

Estaba ahí, urgida, buscando el bus turbus que saliera lo antes posible…. Cuando siento una mirada encima y veo. Frente a mí, pero a 20 cm, él, face to face, M. Acababa de llegar (andaba con una mochila). Yo me iba yendo…Quedé muda.

Èl se rió. Yo sonreí tan descolocada. ¿Qué hacer?...¿Qué decir?... Nos dijimos hola. Me mira y me dice, con una sonrisa y ofreciéndome de la mano, ¿coca-cola?. Digo que no. . No recuerdo bien cómo fue el diálogo, pero hubo, y grato. Me parece que él se acercó a saludarme, no recuerdo bien, pero creo que sí. Estaba flaco, mucho más flaco que cuando nos conocimos (yo cuando terminamos bajè cerca de 15 kg. ¿Le habrá pasado eso a él?, no le pregunté). Hacía un año que no lo veía, desde que nos encontramos en el metro.

Creí que lo iba a encontrar feo, canoso, guatón… pero no. Lo encontré lindo, pelo lindo, flaco… me encantó, otra vez. Me cargó que me encantara. Me dijo si me podía ir media hora después, le dije que no….(primero le dije que no, luego de que hablamos un rato, le dije la verdad, “en verdad no puedo”, le expliqué en rápido lo de la maleta y el atraso). Dijo, preocupado ¿y la encontraste?. Y yo digo orgullosa, mostrándola, “sí, la encontré”.

M me ayudó a comprar los pasajes (estaba lleno, había que ir con la redcompra de un lado a otro, me sostuvo la maleta entretanto). En un minuto me dijo “hace…hace 2 semanas me dieron ganas de llamarte y no te llamé. O de escribirte, y no te escribí”. Me moría ganas de preguntar porqué no lo hizo, pero no recuerdo porqué no le pregunté. Luego dijo “¿quieres anotar de nuevo mi teléfono?”. Me reí. Él agrega: “No te pedí tu teléfono, te pregunté si querías el mío. Me cruje, un poquito”. Yo sólo comenté “la pregunta”… y no pesqué. (Igual se equivocó, la pregunta era “te puedo llamar”, y yo hubiera respondido… “no” o a lo más, “lo voy a pensar”…pero ponerme en el escenario de yo buscarlo a él… no, no jugó bien la carta pregunta).

Le pasa la maleta al sr. del maletero… Me acuerdo de sacar el libro de la maleta (me alumbra con su cel) y saco “Las mujeres del César”, de 1000 pgs. O sea gordo. Lo tengo en la mano, y ahí estamos, ad portas del bus. Y él hace lo de siempre, me abraza. Yo tengo el libro gordo en el pecho agarrado con la mano, es la excusa perfecta para no hacer recíproco el abrazo. Y entonces él dice “pero abrázame, si no te va a pasar nada”, mientras toma el libro… y yo lo agarro (al libro) y él me mira sin entender y le sonrío y le digo lo voy a aguardar… y lo meto en la cartera (gigante que me envió mi hermana de Alemania). Y ahí me abraza fuerte… y lo abrazo. Y lo siento y eso de alguna manera cambió todo. Algo pasó en mi alma con él abrazado… Me subí.

Él me miraba desde abajo. El bus salió. Él esperó en la esquina hasta verme. Y me dice cosas que no comprendo (teníamos la ventana del bus entre medio)… cuando se le ocurre decirme en lenguaje de señas “yo pienso en ti y te quiero mucho”. Me robó el alma otra vez. Creo que es la única persona que conozco, que sabe ese lenguaje y atina a usarlo en un momento como ese. Lo miré… no pude decirle, con señas, “yo también”… (es cierto, y sé que él lo sabe, pero creo que no se lo quiero decir). Pero me gustó N que me lo dijera. El bus partió, le hice chao con la mano.

Me fui pensando en él en bonito las 2 horas de trayecto… llegué a la casa de la N (ella ya se había ido, pero estaba su mamá y me abrió la puerta). Me arreglé y me encontré con el grupo en “bajo llave”, un bar subterráneo al lado del café escondido. “Y hola, tanto tiempo, qué linda estás”…. De los personajes (salvo N). El grupo estuvo divertido. La C ahora hace pesca y hoy se iba a Linares y si todo sale bien el nex year emigra a Sydney… y el amigo del amigo, físico, era paracaidista. Me parece tan seductor tener pasatiempos y proyectos de emigrar viables…Siento que todo eso me está vetado… qué rabia sentir eso.

Me preguntan por la vida porteña (que no conozco, no tengo ni amigos, ni plata ahora, ni ganas allá). Y surge el tema del sueldo, la adm. pública y demás… no le dije a nadie de M. Pero cuando llegué a dormir… me abrazaba tratando de recobrar ese momento… Y me metí al mail en la casa de la N, en la morning, sólo para saber si él me había escrito. Pero no, no lo hizo… Moría de ganas que lo hiciera, que insistiera… pero tal vez sea mejor dejar las cosas así.

4 commentaires:

Aynna Dannan a dit…

Ma cherie, te vi en msn pero fui incapaz de hablarte. Uno porque estaba demasiado resfriada y estaba intentando producir el máximo y seguir acostada...Y dos, mi ánimo andaba por los suelos, y ya veo que fue buena idea... Tu habías tenido tu momento hallmark y yo nada parecido.
Es cierto que empezaste el día muy triste y con esa pega maldita que te desgasta más y más, pero lo terminaste con ese abrazo y sobretodo con una sonrisa durante esas dos horas de viaje... Rico, a pesar que no te escribió... rico igual... cosillas que alegran el alma con pena...
Un besote y un abrazo.

(Me gusta este tamaño de letra)

Anonyme a dit…

su vida es muy bonita. aunque no lo crea. y la quieren mucho. aunque no lo crea. bna. semana. slds. smsthpt.

Juan Pablo Belair a dit…

mmmmm...

Hay buenos presentes saboreando el pasado... pero es eso... sensualidad... ni más ni menos, pero las historias, incluso con los mismos protagonistas, hay que empezarlas nuevamente... eso creo...

Anonyme a dit…

Calma Mi Alma


La vida era una rueda giratoria,
solos hasta que...
algo se dijeron con abrazos, con los ojos, con la voz,
re-mecieron coordenadas...

Llegaron las certezas sin palabras,
pararon de correr.
Se re-conocieron,
se sintieron casa.

(pero) la ciudad, amplificó todo el ruido
de dos mentes con heridas de la historia
y las palabras enredaron la emoción,
y ella corrió, ella corrió...

Sus manos ya venían dibujadas,
lo supo en regresión (de otra vida).
Cuando vinieron a matar, el no la pudo defender mejor
(pidió perdón),

y ahora el tiempo ya es mejor,
para la fe y nueva semilla, para ser.
(todo lo posible)

Ella es una sanadora,
y el ahora la sabrá defender
(y creer),

(y) darle tiempo, darle espacio, darle fe, darle una oración,
darle aire, darle luz, darle silencio
(o quizás una canción es un espejo
de que hubo cuervos, de que hubo luz).

Cruza espacio entre lo dual y lo total,
y guarda el miedo, sueña el sueño, des-encierra el alma,
que todo podrá ser mejor.
(silencio)